Nunca me despiertes.

Creo que antes de ti nunca supe lo que quería, pero dejé de cuestionarme cosas cuando encontré respuestas en tus ojos. Y a mí me gusta este mundo tan nuestro y que todo cambie de color a tu lado, que cada vez que te mire encuentre un motivo nuevo para quererte. Hoy no quiero dormir, ni siquiera soñar despierta, estar contigo supera cualquier mundo onírico. Y ahora lo entiendo, todo encaja, tenías que ser tú, tan tú, tan especial, tan cargado de risas a provocar...Sí, se puede decir que eres todo lo que necesito, o afirmar que centralizas y compones mis ganas. En tres palabras, gracias por quererme.